martes, 28 de octubre de 2008

Luca, te prefiero vivo Parte 2


Pettinatto, unos momentos antes de subir al último Obras de SUMO declaró que el rock es una vida estúpida, que, como está acompañada de muchas vidas estúpidas, la gente cree que es “the best”. Quizás fue un comentario lúcido.
Escuché al periodista Enrique Symns decir que Luca había muerto de sobredosis. Que vaya a saber quién le consiguió heroína y se picó por última vez aquel 22 de diciembre de 1986. Eso podría explicar su muerte material, su cadáver con una sonrisa en la boca. Pero todos quienes fueron testigos de sus últimos días, dijieron que lo veían cada vez peor. Yo voy a arriesgar la idea de que las adicciones fueron causa necesaria pero no suficiente de su muerte Había otras cosas: Sumo empezaba a decaer en cuanto a convocatoria, los amigos quizás lo descuidaron un poco, no tenía contención en ningún lado, la coherencia con su propio personaje de roquero provocador le haría difícil pedir ayuda, no tenía familiares cercanos, no tenía patria, no tenía plata ni bienes… Ahora su hermano Andrea dice que Luca ya había hecho un “pacto” consigo mismo: iba a morir haciendo lo que quería. Ya se había despedido de algunos amigos poco tiempoatrás.El rock, sobretodo el que más había influenciado a Luca (la escena londinense de fines de los setenta), hacía un culto de los excesos suicidas y de hacerle “fuck you” a la sociedad, a la vida "responsable" dentro del “sistema”. Ese rock se había llevado a Sid Viciousy a Ian, el cantante de Joy division, entre otros. Pero ¿No era Luca lo suficientemente inteligente como para eludir ese destino impuesto (en ultima instancia ) por una moda? ¿Tenía que caer en la picadora de carne de ídolos roqueros? Para mí, no sólo era que seguía un estereotipo, la sociedad lo había expulsado de Italia (cárcel militar, insanía mental), en Londres (también él se la buscaba, ok) la heroína lo había encadenado a un camino hacia la muerte y ahora en Argentina había sido rebelde, provocador, critico, descreído, bohemio. ¿Que iba a ser después de Sumo? ¿Trabajar en un Kiosko? ¿Aceptar un empleo Público? ¿Criar ganado en Córdoba? No, con su discurso había trazado un destino. (Nuestros discursos nos atan a un compromiso con la existencia. Por eso hay que ser cuidadoso con lo que se dice: “mejor no hablar de ciertas cosas” decía la letra que dicen pertenecía a Solari) En el marco de la falta de sentido en la vida, la falta de un proyecto, el "no future" personal de Luca, actuaron la falopa, el alcohol, etc. Los excesos no actúan sino allí donde encuentran terreno fértil. Su discurso (que le decía fuck you a todo), los golpes, los abandonos, los exilios que había juntado la vida de Luca eran el humus donde germinaria su naufragio. ¿Porqué digo esto? Porque me rompe un poco las bolas que en cada documental le pongan tanto énfasis al reviente (ginebra, merca, etc) . Hay como un amarillismo por parte de la prensa que desdeña las cualidades positivas de Luca. Como si su esencia estuviera en el reviente. Se pone en un segundo plano su inteligencia, su generosidad, su capacidad para marcar a fuego la historia del rock en la Argentina, etc. Y me jode esta visión que resalta al reventado porque veo en alguna gente (sobre todo en el ámbito de la música) que parece valorar a los artistas más por sus debilidades que por sus méritos. Charlie Parker fue un genio a pesar de la heroína; Jim Morrison hizo cosas copadas en el rock a pesar de ser un reventado y Luca hizo cosas maravillosas a pesar de sus adicciones. Por otra parte ¿Acaso no tendríamos que admirar y valorar más a los que supieron seguir viviendo: Spinetta, Mick Jagger, Eric Clapton, Jimmy Page, Sting, etc, más que a los muertos del rock?. ¿No son ellos los “heroes” ya que supieron vivir, o pudieron vivir?. Lamentablemente la cultura sobredimensiona a los “mártires”. Hay un espíritu nostálgico y melodramático que rinde culto a los muertos jóvenes. Quizás porque llegar a viejo, especialmente en el rock, tiene una cuota de patetismo (el rock es un fenómeno preeminentemente jóven) Pocos se calzan una viola eléctrica a los sesenta y pico sin dar una imagen un tanto ridícula.
Ahora que lo pienso, una de las positivas cualidades de Luca era cierta actitud de payaso. No había ni una pizca de solemnidad en él. Tenía mucho sentido del humor. Comparado con la seriedad de Morrison (por ejemplo), que parecía tomarse en serio lo que hacía, Luca parecía decirnos “esto es joda, no me tomen en serio”. Por eso la frase de Pettinato que hemos citado vale: el rock puede ser una vida estúpida y por lo tanto, no deberíamos tomarlo demasiado en serio. Se trataría más de un juego que de un Arte; más una fiesta que una misa. No le pidamos una ética al rock, busquemos en él primero algo que nos entretenga y nos brinde una experiencia bella. Sabemos que en su momento fue parte de lo que se llamó la “contracultura”. Pero eso es para otra nota. Luca era políticamente incorrecto (las antípodas de un Gieco por ejempo), la “línea” que bajaba desde sus palabras tenían que ver más con su experiencia individual que con un movimiento colectivo. Nunca se postuló como un ejemplo de vida para nadie, simplemente vivía como podía. No me convencen los que lo tildan de una persona “autentica” por llegar al extremo del abandono de la sociedad. Por ahí es mejor tomarlo como alguien “trágico y payasesco” Luca hablaba desde un circo, no desde el palco de los moralistas. Y eso quizás sea una de las características atrayentes de su “obra”, la ausencia de una intención edificante.

Mariano
Clown de las palabras

PD: aconsejamos escuchar de Sumo por lo menos los siguientes bellos temas: “Mañana en el Abasto”, “Estallando desde el Océano”, “Mejor no hablar de ciertas cosas”(este posiblemente tenga letra del Indio solari) y “Heroína”.